martes, 11 de junio de 2013

Capítulo VI.- Historia de un maestro

-Tú eres Carlos, ¿no? –me preguntó aquella chica morena de unos 24 años aproximadamente, o eso calculaba yo-. El nuevo profesor supongo…
-Sí, ese soy yo. Miguel me dijo que hablase contigo –le dije todo colorado.

Aquella chica me había roto los esquemas, no esperaba encontrarme con una chica así la verdad, y menos que resultase que fuese ella la que me respondiera a todas las preguntas.

-Aquí en frente hay una cafetería, podemos ir si quieres. Será más cómodo para hablar –me decía señalando por la ventana el establecimiento.
-Sí, como tú quieras. Aquí la experta eres tú –le dije mientras me daba cuenta de que estaba diciendo una soberana chorrada, o al menos pensé en ese momento en el que quería que todo fuese perfecto.

Salimos de la sala de profesores sin decir adiós a nadie, algo que me sorprendió, la verdad. Entré sin que nadie me mirara y salí de la misma manera. Muy majos todos.
En cinco minutos ya estábamos sentados en la cafetería, uno enfrente del otro, tomando ella un café y yo un Colacao, no soy mucho de café.

-Así que el nuevo profesor… ¿Pero tú no eres muy joven? –me preguntó mientras echaba el azúcar a su café.
-Sí, bueno, tengo 22 años. Tú tampoco pareces muy mayor la verdad –le dije riendo con el fin de darle confianza a la conversación.
-Bueno, tengo 28 años, aunque aparento alguno menos, no te lo niego –me contestó devolviéndome la sonrisa. Me dejó un poco trastocado cuando me dijo su edad-. Bueno, y qué, ¿preparado?
-Pues no te sabría contestar, va a ser la primera vez que doy clase. Al director le vendí un discurso de profesor progresista con las ideas claras que parece ser que triunfó, pero la verdad es que estoy un poco acojonado –nada más decirle eso me di cuenta de que no la conocía de nada y que a lo mejor lo que yo dijese en esa conversación sería dicho posteriormente al director, pero bueno, yo seguí siendo natural.
-Jajaja –se rio Paula-. Tranquilo, es normal si es la primera vez. Yo estuve el año pasado con el grupo que te toca a ti este año. Podía haber seguido con ellos pero hubo una jubilación y un grupo de 1º de primaria quedó libre y, sinceramente, prefiero a más pequeños.
-No será porque son unos cafres los míos ¿no? –le insinué riéndome.
-No hombre, pero cuando llegan a 5º o 6º ya se cuestionan un poco más tu autoridad y tienes que hacer esfuerzos mayores por mantener el orden. Siendo claros, desgasta más. Yo no tengo carácter suficiente y se me suben a las barbas con facilidad, así que mejor con los pequeños –me dijo echando una carcajada-. De todas formas si logras hacerte respetar y mantener el orden, tienes un buen grupo de niños. Aunque bueno, te tocó Pablo, el terror del colegio. Es un niño que acaba de repetir 6º, así que yo no le di clase, pero sí te digo que a lo mejor te hace un poco difícil la convivencia, o eso tengo entendido
-Fantástico –le dije con mi mayor ironía-. Tengo una pregunta, si esto es un colegio privado, ¿por qué no lo echan al niño?
-Sí, un colegio privado es, por cierto, que no es religioso, gracias a Dios. Seguramente ya lo sabías pero siempre quise hacer esta broma –me dijo poniendo cara de saber que había sido un poco patético el chiste-. Bueno, el caso es que este colegio está acusando la crisis como el resto del país. Han reducido personal de apoyo educativo por falta de recursos económicos, y cuando se le comunicó a los padres de Pablo que debía de abandonar el colegio pues éstos se ofrecieron a duplicar la cuota que ellos pagaban con el fin de evitar dicha expulsión. El colegio obviamente aceptó, pero claro, el marrón te cae a ti ahora JAJAJAJAJA.

Si te digo la verdad, siempre me gustaron los retos. Que algo sea difícil no quiere decir que no deba de intentarse, quiere decir que debe de intentarse más fuerte, y por ese lema me regía yo a lo largo de mi vida. Paula me dio a entender, sin decírmelo, que tenía un grupo complicado. Que tenía que hacerme respetar, que a ella se le subían a las barbas, que cuestionaban la autoridad,…

Estaba hipermotivado, pero tampoco era plan de soltarle a Paula “¡toma, que empiece la fiesta!”.

3 comentarios:

  1. Entre "Petar" Y "Colacao", ya me tenés varias veces consultando Google para poder seguirte el hilo.

    Hoy mi ocio va dedicado a leer tu blog, Antón.

    ¿El Colacao es tan energético y nutritivo como dice ser?

    Gran historia hasta ahora, sigo leyendo Con avidez de lo que vendrá.

    Saludos

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    1. Uso un vocabulario muy coloquial.

      El Colacao no sé, yo en realidad soy más de Nesquik jaja.

      Me alegra que tu ocio vaya hoy dedicado a mi blog. Prometo dedicar un día de estos mi ocio al tuyo ;)

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  2. Me parece genial que escribas coloquialmente, es una buena forma de aprender de tu cultura y sus expresiones.

    ¡Nesquik rules! jajaja

    Pasá cuando gustes, el blog sigue creciendo.

    un abrazo

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